miércoles, 8 de julio de 2009

La Beata Paulina y su amor a la Eucaristía


A la edad de veinte años su confesor le permitió comulgar diariamente. Esto sucedió setenta años antes de que el Papa Pío X permitió a los fieles comulgar frecuentemente. Comulgar diariamente parece muy fácil decirlo. En la época de Paulina tenía un significado heróico. Ella diariamente hacía 10 km para ir desde Böddeken donde vivía hasta la Parroquia de Wewelsburg y poder asistir a la Misa; y esto muy temprano por la mañana. De regreso a su casa se encontraba con muchos enfermos que solicitaban su ayuda. La comunión diaria va muy de la mano con el amor al pròjimo.

Este amor a Jesús Eucaristía era el alma de su vida. Así se sabe que cuando emprendía largos viajes para visitar a sus hijas diseminadas por Alemania, América del Norte y América del Sur, lo primero que preguntaba era por la Misa para poder comulgar. En ocasiones habiendo viajado toda la noche y llegando a las 9hs. a cierto lugar, fue desde la estación del ferrocarril directamente a la Iglesia para recibir a Jesús Eucaristía. Que este amor entrañable de nuestra Madre Fundadora por el Santísimo nos interpele cada día a prepararnos concientemente a recbirlo con renovado fervor." El amor al Santísimo Sacramento es mi vida , mi felicidad, a El le debo la gracia de mi vocación"

Entrada destacada

Año dedicado a San José .

"La grandeza de san José consiste en el hecho de que fue el esposo de María y el pa...